Latidos lo despiertan, flota en un calor denso entre paredes palpitantes. Lo último que recuerda es que lo subían a una ambulancia. Ahora, bajo la tenue luz rojiza, no tiene tiempo para entender; lleva sus diminutas manos al cuello: un cordón lo asfixia, se desvanece, y se apaga nuevamente.


Tags: CuentoCorto Microficción RelatoBreve HorrorExistencial FicciónOscura NarrativaBreve


Invitame un café en cafecito.app